sábado, 7 de mayo de 2011

¡VAMOS DE BODA!



Amaneció un día precioso, y lo primero que hicimos, fue encaminarnos a una peluquería. Nos dejaron el pelo demasiado"bien puesto" pero era la moda que predominaba por entonces.
La ceremonia fue muy emotiva, y entre los invitados ,
la juventud ganábamos por mayoría.  Evidentemente, yo no conocía a nadie, ya que de parte de la novia solo estábamos nosotras dos, más sus padres y hermanas,
Ynés soltera y Viruca monja, o sea "solas" sin ningun acompañante, pero la parte del novio eran más de familia, y luego los amigos de ambos.
Total, que mi primer día en Barcelona fue completito, y guardo muy buen recuerdo de él.
Cuando llegamos a casa ya habian tomado posesion de sus aposentos las nuevas inquilinas, Tere y Pili. Ambas nos causaron muy buena impresión, el tiempo se encargaría de confirmarla.
El Lunes nos pusimos las pilas y nos dirigimos al sitio más cercano de los que teniamos subrayados. Era una fábrica de chasis para televisores. Nos presentamos, y ya nos quedamos para hacer unas pruebas
Al principio nos pusieron en unas máquinas, como quien rellena una canilla en la máquina de coser, solo que aquí eran unos carretes; yo pedaleaba todo lo de prisa que podía, (eso se me daba bien), pero al cabo de un rato viene el encargado, mira su reloj, mira el cuenta-vueltas de la máquina, y se lleva los carretes que tenía rellenos.  A partir de ahí, no me quita la vista de encima, y yo empezaba a ponerme nerviosa, pero seguía pedaleando. Al cabo de otro rato, la misma operación. Supongo que yo pondría cara  de interrogación, como diciendo que no podía ir más a prisa, porque acto seguido me dijo" no se preocupe, pedalea usted muy bien, pero falla el cuentavueltas". Supongo que los nervios me jugaron una mala pasada y me dió por reir, pero contagié al encargado y reimos todos. Esta fue mi primera anécdota como aprendiz. Me cambió de máquina, y todo resuelto.
Terminada la prueba, una visita a las oficinas, las clásicas preguntas de si nos gusta, que nos parece, etc,  nos dicen las condiciones, y si nos interesa podemos empezar al día siguiente, treinta de Septiembre.
Ni lo pensamos, a ojos cerrados dijimos que sí.
Lo que más nos gustó: que nos pillaba a diez minutos de casa caminando ligerito.
Lo que menos: empezar a las seis de la mañana. El horario era de 6 a 3´30, con media hora, de 10 a 10´30 para el bocata. Pero bueno,  como esto lo habíamos conseguido tan fácil, pensabamos que si no nos gustaba ya buscaríamos otra cosa,  de momento ya teníamos algo, que el mes pasaba muy pronto a la hora de pagar el alquiler.

8 comentarios:

  1. Loli:
    No había leido este de la boda. Tu eres la de la derecha o la de la izquierda?.

    Bueno y ahora me voy a leer lo siguiente que veo que hay nuevo capítulo.

    Besos

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  2. Le hacia la competencia a la novia en el color

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  3. Le hacía la competencia a la novia en el color

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  4. Le hacía la competencia a la novia en el color

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  5. ¡ Alá! por triplicado por si no te enteras.
    (me despisté)

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  6. ¡Alá, por triplicado ,por si no te enteraste!
    (la que se despistó fui yo)

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  7. Hola Loli, las bodas por aquellos tiempos eran muy diferentes a las de ahora, pero también se disfrutaban mucho, el peinado, es tal como se llevaba, estáis muy bien en la foto las tres.
    Un abrazo.
    Rosa.

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  8. Qué guapísimas se os ve! Y qué fácil os resultó encontrar trabajo, eh, ¡como ahora! También es verdad que en aquella época no se rechazaba casi nada, ¿verdad?
    Voy a leer la otra entrada, que me he quedado un poco atrasada.
    Un abrazo
    Conchi

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