Pero la vida sigue y una no puede quedarse atrás.
Verano de 1987. Mis hijos acompañan a su padre cada día a pescar porque no queremos que se pasen el día araganeando por ahí. David terminó la básica y no quiere oir hablar de libros, yo tengo la esperanza de que cuando se de cuenta que trabajar( al ser menor de momento tendría que ser con su padre) también requiere sacrificio, se lo plantee de otra
manera.
Es un entusiasta de todo lo relacionado con el mar como su padre, y cada tarde sale hacer prácticas en el optimis con su compañero Alex ( ambos se compenetran muy bien en la vela) y el instructor, que tiene puestas en los dos muchas esperanzas de que en la próxima regata de competición puedan subir de categoria y pasar a... ( despues de tantos años no recuerdo el nombre, si recuerdo que tenía dos dígitos, B 30. ó B 40...es igual). Y sí que subieron, con copa y todo, la pena es que no tengo ningún recuerdo visual.Y con la E.G.B. Termina el historial academico de mi hijo, algo que siempre llevé muy mal
¡con lo que yo daría por haber podido estudiar! a veces me culpo diciendome que teníamos que haber sido más severos y obligarle.
Si no tuviera la posibilidad de acompañar a su padre está claro que no podríamos dejarlo sin hacer nada , pero entre esa opción o la de que no cogiera un libro de texto durante el curso como no se cansaba de repetir, decidimos hacer lo primero. De todos modos, si pasado ese curso se planteaba volver no habria problema para entrar en el instituto. Pero ni lo mencionó.
Loli, hacía dias que no visitaba tu blog y no había leído las últimas entradas. Siento que tu padre se fuera tan pronto y que no pudiera volver a Cangas. Hay que ver que nunca sabe uno dónde terminará sus días ni cómo, pero lo importante es lo que tú dices, que por lo menos esté uno rodeado de los suyos en los últimos momentos.
ResponderEliminarEn cuanto a lo de tu hijo, te entiendo perfectamente, pero si no quieren estudiar es difícil obligarlos. ¿Él fue feliz? Pues ya está.
Te mando un fuerte abrazo
Conchi
Loli, lo importante es que sean buenos trabajadores en el oficio que desempeñen y sobre todo buenas personas, los padres como es lógico, siempre deseamos lo mejor para nuestros hijos.
ResponderEliminarAbrazos.
Rosa.
Hola, Loli:
ResponderEliminarQue no haríamos por nuestros hijos, pero finalmente, son ellos, quienes escogen el camino.
Muchas gracias por tu amistad y cariño, Dios te guarde y te bendiga.
¡Feliz Navidad!
Abrazos.
Tienes razón Conchi no sabemos ni como ni cuando será nuestro fin. En cuanto a mi hijo es lógico que como madre me entiendas pero yo digo que se equivocó de cuna o nació bohemio, porque no le gusta la rutina, ni los horarios... escritor tenia que ser. Bueno yo creo que es feliz, pero mi intuición me dice que aunque reconoce mi razón si pudiera retroceder haría lo mismo, y mira que en 6º hicieron en su cole un test de inteligencia a 100 alumnos y el estaba en el nº 78 pero ¡que le vanos hacer!.
ResponderEliminarRosa después de todo yo pienso como tú. Que sea buena persona(lo es) y buen trabajador (también lo es) se gana su pan honrradamente que es primordial.
Rafael eso opino yo¡que no haríamos por ellos!
todo nos parece poco.
Feliz Navidad para tí y los tuyos.