La verdad que es una gozada llegar a la jubilación con la ilusión de que empiezas una nueva vida. Sin prisas, sin agobios,
con ganas de hacer muchas cosas, pero cuando tú quieras, no cuando el tiempo te lo permita. Así es como llegó el, lleno de una ilusión que yo compartía plenamente.
David es muy activo, por eso pronto empezó a buscarse un entretenimiento y empezó por hacer una pérgola en el jardín,
con su mesa para 12 comensales-que casi siempre se nos queda pequeña- y un par de bancos a cada lado. Era su primera obra, pero como le salió bien, no sería la ultima.
Nos marchamos a Mallorca pasar diez días a finales de Septiembre aprovechando unos días personales que yo tenía.
Alquilamos un coche y nos desplazábamos a nuestro antojo por lo que nos recorrimos toda la isla.
Tanto Celi como David son los promotores para poner algo en marcha, Enrique y yo, más tranquilos, los seguíamos al relentín, pero los cuatro muy bien sincronizados.
El penúltimo día de nuestra estancia coincidió con el cumpleaños de mi hermana y para ese día ya teníamos marcado el itinerario. Nos fuimos al puerto de Andraix donde nos dimos un paseo hasta el final y tomamos el vermut.
Luego nos acercamos hasta el puerto de Soller para comer un arroz de bogavante al que mi hermana nos invitó. Terminamos con otro paseo haciéndonos esa foto para el recuerdo, y luego entramos en las tiendas de suvenirs para traer cuatro cositas. Nos costó decidirnos hacer esta salida, pero no nos arrepentimos porque lo pasamos fenomenal.
Loli, ¿que tal estás? Vengo a saludarte, gracias por tus comentarios, y me encanta leer tus crónicas familiares, disfrutad mucho todos reunidos que es una maravilla.
ResponderEliminarUn abrazo
Loli, felicidades a tu marido por esa prejubilación.
ResponderEliminar¡Disfrutad de esta nueva etapa!!!
Bss
Hola, Loli.
ResponderEliminarParece que David es un manitas y sabe como aprovechar el tiempo que tiene libre después de su jubilación.
Abrazos.
Rosa.
Hola, Loli. Ya estoy en casita y me he venido a visitar tu blog pues llevo dos entradas atrasadas, jeje. Me ha gustado mucho esta, en la que cuentas lo de la jubilación de tu marido y las cosas que empezó a hacer después. Me parece fantástico. Además, que la mesa está genial!!!
ResponderEliminarTambién imagino que ese viaje que hicisteis con tu hermana y tu cuñado nunca lo olvidaréis. Como tú dices hay que quedarse con las cosas buenas y esta es una de ellas. Las demás, mejor olvidarlas, o al menos no estar siempre acordándonos de ellas.
Un abrazo grande
Conchi
Gracias amigas. Como veis mi dia a día es de lo más normal, de lo que si me doy cuenta es que ya no es tan habitual tener una relación tan fluida y cercana con la familia como yo la tengo y por lo que cada dia doy gracias a Dios.
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